El último caso de Yongyu Glass revela las ventajas esperadas e inesperadas de la pared de vidrio acanalado curvo. Las mamparas de vidrio acanalado circulares, que permiten la luz natural y la privacidad, crean un flujo eficaz y promueven el distanciamiento social. El vidrio translúcido separa el espacio a la vez que mantiene la sensación de conexión.
En este proyecto, analizamos cómo la solución de pared de vidrio canalizado con doble acristalamiento aborda los desafíos de diseño. Las preguntas que abordamos incluyen secciones dedicadas al diseño económico, la sostenibilidad y la privacidad acústica, visual y física. Los comentarios de arquitectos e instaladores describen los aspectos colaborativos del diseño, mientras que los dibujos detallados de Yongyu Glass ilustran cómo el vidrio canalizado se integra en la distribución y se conecta con otros sistemas.
El vidrio de canal es un vidrio translúcido, tridimensional y texturizado, con un ancho que varía entre 23 y 19 pulgadas y una longitud de hasta 23 pies. Su icónica forma de ranura en U le confiere gran resistencia y lo hace autoportante, lo que permite crear tramos de vidrio largos e ininterrumpidos con mínimos elementos de enmarcado.
La pared de doble acristalamiento de Yongyu consta de filas de canales de vidrio independientes enfrentados (bridas). La brida forma una cavidad llena de aire o inserciones aislantes, lo que proporciona excelentes propiedades acústicas. El vidrio texturizado bloquea la línea de visión a través de la pared, a la vez que transmite una luz suave y difusa. Las paredes de vidrio para pasillos son ideales para aplicaciones de privacidad y luz natural: una solución moderna para los nuevos desafíos que enfrentan los diseñadores actuales.

Hora de publicación: 29 de octubre de 2021